EnMetamizol magnésico es un AINE que se utiliza habitualmente en nuestro medio en paciente quirúrgico, a pesar de no estar comercializado en numerosos países (Reino Unido, Dinamarca, Noruega, Suecia, EE.UU., Canadá, Australia, etc) que consideran con mayor riesgo que beneficio. Su indicación es para el dolor agudo e intenso o fiebre alta que no respondiese a otros tratamientos.

Los principales problemas de seguridad del metamizol son los cuadros de anafilaxis aguda y las discrasias sanguíneas como la agranulocitosis, la anemia aplásica y la pancitopenia. Estas reacciones adversas del metamizol, aunque conocidas y muy poco frecuentes, son graves e incluso pueden ser mortales. La agranulocitosis se define como una disminución del número de neutrófilos por debajo de 500/mm3, que puede ir acompañada de fiebre, infección clínica o signos de choque séptico.  Aunque se desconoce el mecanismo exacto de la etiopatogenia de la agranulocitosis por metamizol, se considera una reacción de tipo inmunológico. La mayoría de casos se dan en los primeros siete días y con dosi diarias <4g. 

No obstante otro aspecto que recomendamos monitorizar en caso de administración continuada de dicho fármaco son las alteraciones electrolíticas, especialmente en caso de insuficiencia renal. Las concentraciones de magnesio se controlan principalmente a nivel renal, mediante la variación de la reabsorción a nivel tubular. En caso de un exceso de este electrolito se disminuirá la reabsorción y se disminuirá la concentración de magnesio. 

La pauta habitual de dicho medicamento es de 2g cada 6-8 horas. En la ficha técnica no está especificada la cantidad de magnesio que contiene cada vial, pero gracias a una publicación del 2014, se estima que cada vial puede contener entre 5-6 mEq de magnesio (0,06-0,07g). Por ello, la dosis total que se puede llegar a estar administrando en este contexto puede llegar a ser de 15-24 mEq/día, superándose los requerimientos diarios de este electrolito. (recordad por ejemplo que el aporte de una dosis de sulfato de magnesio externo aporta 12 mEq de Mg, por lo que podemos llegar a estar administrando el equivalente a 1-2 ampollas/día).

Este aporte se debe de tener especial consideración en caso que el paciente presente ya una hipermagnesemia manifiesta o bien que desarrolle una insuficiencia renal o que esté recibiendo aportes externos de magnesio.

Así mismo, si queréis realizar un repaso muy breve del manejo de la hipermagnesemia, no olvidéis revisar este enlace de la página.

En resumen:

– El aporte por ampolla de magnesio está entre 5-6 mEq de Mg. Se recomienda monitorizar dicho electrolito especialmente en pacientes con insuficiencia renal. 

 

Bibliografía

– Recomendación esencial. Metamizol en el tratamiento de la fiebre y del dolor agudo. Enero de 2020. Enlace 

– MA Campos. Contenido en magnesio de los medicamentos: ¿tenemos información suficiente? Farm Hosp. 2014;38(6):486-497